Para los operadores de carga, cada kilómetro recorrido es una apuesta contra lo inesperado, con baches profundos que obligan a maniobras riesgosas, curvas mal señalizadas que no perdonan errores, jornadas agotadoras que desafían la resistencia humana y unidades que, con o sin supervisión, siguen su camino en condiciones inciertas.
Los accidentes y situaciones de riesgo no son hechos aislados, son parte del día a día en las carreteras federales. Pero ¿cuál es la verdadera solución? ¿Más regulación? ¿Mayor supervisión? ¿Infraestructura adecuada? La respuesta, de acuerdo con Miguel Guzmán Negrete, perito certificado, consultor en seguridad vial y director general de Pisvi Mobility, no está en un solo factor, sino en la creación de un modelo sistémico de prevención, que ponga al conductor en el centro de todas las decisiones.
Los esfuerzos de supervisión en carreteras federales siguen siendo insuficientes para reducir el riesgo de siniestros. Por ello, es necesario adoptar una estrategia integral que contemple infraestructura segura, inspecciones rigurosas y tecnología avanzada en los vehículos, explicó Guzmán Negrete en entrevista con T21.
Comentó que existen tecnologías que pueden ayudar a mejorar la seguridad en carretera, como cámaras de inteligencia artificial dentro de la cabina que alertan si el operador se está quedando dormido, sensores de distancia con otros vehículos y sistemas que detectan el exceso de velocidad o la salida involuntaria del carril.
¡Falta de supervisión en carreteras!
Luego de que la misma presidenta de México, Claudia Sheinbaum, reconociera la falta mayor supervisión en las carreteras federales durante la conferencia matutina del 17 de febrero, la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) informó que en 2024 se realizaron 174 mil 862 verificaciones de peso y dimensiones al autotransporte federal, además de 47 mil 805 inspecciones físico mecánicas a unidades.
Sin embargo, estas cifras siguen siendo insuficientes. Guzmán Negrete advierte que el riesgo persiste y hay que tomar medidas más completas.
“Primero hagamos una infraestructura segura y luego sí, tienen que venir otras cosas. Tiene que venir esa parte de inspección de los vehículos que deben de estar en óptimas condiciones. También la empresa tiene que darles vehículos en óptimas condiciones al conductor”, explicó Guzmán Negrete.
El especialista advirtió que la falta de seguridad vial en México es un problema multifactorial en el que los siniestros viales se deben en su mayoría a errores humanos, seguidos por el estado de la infraestructura y fallas mecánicas en los vehículos.
Entre los principales factores de riesgo mencionados por el especialista destacan el exceso de velocidad, distracciones al volante (como el uso del celular), la fatiga de los operadores y el mal estado de las unidades.
Miguel Guzmán Negrete explicó que los operadores suelen enfrentarse a jornadas extenuantes sin el descanso adecuado, lo que aumenta la probabilidad de accidentes.
Enfatizó que cualquier estrategia de seguridad debe priorizar a los operadores y garantizarles condiciones adecuadas de trabajo.
“El sistema del que estoy hablando tiene que tener como centro de toda política empresarial o gubernamental a la persona. La persona es la que se tiene que ver beneficiada con todas nuestras acciones. Así es, de todos: de la empresa, del gobierno, de mantenimiento de la carretera, en fin, de todo”, puntualizó Guzmán Negrete.
Para el especialista, otro de los factores que han contribuido al deterioro de la seguridad en carretera es la eliminación de la Policía Federal de Caminos, que realizaba operativos de control de velocidad, como el “carrusel”, donde patrullas circulaban a una velocidad moderada para marcar el ritmo del tráfico y evitar exceso de velocidad.
El uso de tecnología en el autotransporte también es un punto clave. Guzmán Negrete destaca que hoy existen sistemas avanzados que pueden ayudar a reducir riesgos.
“No hay pretexto para decir ‘es que mi vehículo tiene 20 años de uso’ porque se puede poner ciertos dispositivos tecnológicos y se puede colocar sin problema”, comentó.
Sin embargo, enfatizó que la tecnología debe formar parte de una estrategia más amplia que incluya auditorías viales, operativos de supervisión y un enfoque centrado en la seguridad del operador.
“El afectado hoy en día es el conductor por la inacción de todos, pero es el que debería de verse beneficiado por la acción de todos”, concluyó.
Regulación vs prevención: El dilema tras los accidentes del autotransporte de carga
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