De acuerdo con las disposiciones del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), queda mes y medio para que la industria automotriz cumpla el requerimiento de origen del 75% de componentes y 70% de materiales para mantener el tratamiento arancelario.
Anteriormente, el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) permitía el 62.5% de contenido regional, mientras que el T-MEC aumentó a 66% desde su entrada en vigor (1 de julio de 2020), incrementando cada año hasta llegar a 75 por ciento.
En conferencia de prensa, Manuel Montoya, director general del Clúster Automotriz Nuevo León (Claut), señaló que, aunque de 2019 al 2022 el contenido regional se incrementó en un 8% debido a esta situación, se debe terminar de regionalizar la industria.
Explicó que, si bien la mayoría de las exportaciones de México van a Estados Unidos (alrededor del 84%), en las importaciones no ocurre lo mismo, tan solo en la industria de autopartes las importaciones tienen un valor de 60 millones de dólares, de acuerdo con la información brindada por Montoya.
Además, señaló que hoy en día en el contenido nacional de lo que se produce en la industria corresponde al 15%, por lo que “es un reto seguir incrementando el contenido regional y local al mismo tiempo que llegan nuevas oportunidades”.
“Estados Unidos sigue siendo nuestro principal proveedor de autopartes y de componentes, seguido de China, Japón, Corea y Alemania. Esto es precisamente el reto del T-MEC, cómo reducir ese ese porcentaje, que hoy es casi un 30% de lo que México importa, cómo podemos sustituir importaciones que vengan de esos cuatro países, porque nuestras empresas OEM (fabricantes de equipo original) lo necesitan para conseguir el contenido regional”, dijo.
Puntualizó en conferencia de prensa que la mayoría de las partes importadas son componentes, que son el gran reto, por lo que la oportunidad está en los proveedores Tier 2.
Asimismo, comentó que lo que más buscan las empresas son inyección de aluminio, que la han pedido más de 30 empresas y solo existen seis proveedores, así como maquinado, fundición de aluminio, forja en caliente y frío, entre otras, todas en la misma situación.
“Necesitamos más proveedores que nos vengan a traer estos componentes que hoy estamos importando porque al final los autos se están produciendo, pero con componentes importados. Tenemos las OEM y las Tier 1 muy establecidas aquí desde hace años, incluso hay nuevos jugadores entrenando con vehículos eléctricos, pero la base de la pirámide, los Tier 2, son insuficientes tenemos que resolver y tener más proveedores de este nivel”, dijo.
Nuevo León se ha convertido en uno de los estados que más capta inversiones extranjeras de empresas que buscan relocalizar sus líneas de producción, pero, además, desde hace algunos años las armadoras automotrices han encontrado en el estado una oportunidad de negocio.
Por ejemplo, en el estado se encuentra la planta de KIA, abriendo oportunidad para también regionalizar sus proveedores, ya que al menos 12 de sus principales proveedores Tier 2 se encuentran dentro del mismo parque. Asimismo, hace poco Tesla acaba de anunciar la inversión en su nueva planta en Santa Catarina, incrementando aún más este mercado en el país.
“Nuevo León está captando mucho de toda esa oportunidad de negocio y esto va a traer oportunidades para los proveedores, no solo para la manufactura, sino para ofrecer servicios adicionales e irnos un poco más allá de la manufactura a ofrecer soluciones completas”, comentó Ramiro Montero, presidente del Claut Nuevo León.
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Por su parte, Juan Carlos Meade, director de Cadena de Suministro de la Secretaría de Economía de Nuevo León, señaló que, de octubre de 2021 a febrero de 2023 más de 125 proyectos de inversión fueron confirmados en el estado, de los que 30% pertenecen al sector automotriz.
Ante este panorama, el Claut Nuevo León, en coordinación con la Secretaría de Economía del estado, llevarán a cabo el próximo 6 y 7 de junio el evento Proveedor Automotriz 2023 que reunirá empresas Tier 1, 2 y 3, que busca ser catapulta para que las empresas puedan vincular su proveeduría a las OEM.
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