El sector del transporte de carga enfrenta el reto de reducir sus emisiones contaminantes y cumplir con las regulaciones ambientales vigentes.
En esta hoja de ruta “verde”, Cummins anunció la incorporación de su motor X15 Euro VI que, según la compañía, emite hasta cinco veces menos óxidos de nitrógeno (NOx) en comparación con tecnologías previas y mejora el rendimiento de combustible en un 5 por ciento.
El cumplimiento de normativas ambientales no solo implica la adopción de nuevas tecnologías, sino también una inversión significativa para transportistas.
Jorge Machuca, líder del segmento de motores de Cummins para México e Hispanoamérica, reconoció este reto al señalar que la industria se encuentra en “un punto de inflexión que requiere la adaptación de nuevas tecnologías dentro de las operaciones”.
Añadió que, si bien estas inversiones pueden representar un desafío, también pueden traducirse en beneficios económicos debido al menor consumo de combustible de los nuevos motores.
La transición hacia motores más eficientes responde a la necesidad de reducir el impacto ambiental del transporte, un sector responsable de más del 20% de las emisiones globales de CO2, según datos del Consejo Internacional de Transporte Limpio (ICCT por sus siglas en inglés).
En esta línea, Leticia Pineda, líder para México y Canadá del ICCT, explicó durante el taller denominado “Hacia la electrificación del transporte en México” que el transporte terrestre, incluyendo camiones de carga, “es uno de los principales sectores que utilizan combustibles”, por lo que avanzar en eficiencia y reducción de emisiones es crucial.
Pineda, también mencionó que una de las estrategias para disminuir las emisiones del sector transporte era mejorar la tecnología de los vehículos, como motores con menor consumo de combustible.
Uno de los aspectos clave de la normativa Euro VI es la mejora en la eficiencia del combustible y la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Según Cummins, el X15 Euro VI incorpora un reductor catalítico selectivo (SCR) más eficiente y un filtro de partículas (DPF) de alta capacidad y menor peso, lo que contribuye a disminuir el consumo de diésel y las emisiones contaminantes.
México avanza en la adopción de regulaciones ambientales más estrictas para el transporte de carga, en línea con estándares internacionales. Sin embargo, para la especialista del ICCT el cumplimiento de estas normativas implica un equilibrio entre inversión, eficiencia operativa y sostenibilidad, un reto que transportistas y fabricantes deberán enfrentar en los próximos años.
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