Aunque el proyecto de inversión para conectar vía un gasoducto a Puerto Libertad, Sonora, con la Cuenca Pérmica en Texas continúa avanzando, lo que ha crecido es la preocupación ambiental por los impactos que pueda tener su desarrollo, sobre todo en el Mar de Cortés donde se ubica el santuario de la ballena gris. Las interrogantes que tienen los grupos ambientalistas, es sobre el aumento del tráfico marítimo en ese cuerpo de agua, que incrementaría la contaminación por ruido, el riesgo de generar algún tipo de derrame y de colisión con alguno de los cetáceos.
El proyecto del gasoducto busca utilizar al puerto sonorense como punto de exportación de gas natural a países asiáticos con la instalación de una planta de licuefacción del energético y una terminal marítima para su exportación a través de buque-tanques. El proyecto representa una inversión privada importante puesto que incluye también la construcción de 800 kilómetros de gasoducto de 48 pulgadas de diámetro.
Al momento existen cinco procesos de amparo que están frenando la obra y que son respaldados por casi 30 organizaciones qué, a su vez, han lanzado la campaña para definir si se quiere ¿ballenas o gas? Un punto de debilidad en el proyecto es que los desarrolladores aún no exhiben contar con el permiso medioambiental para la construcción de la obra en Puerto Libertad. Ya veremos cómo se desenvuelven las cosas en el noroeste del país.
¿Y los trenes del AIFA-Pachuca?
La presidenta Claudia Sheinbaum dio el banderazo de inicio de obras del tren de pasajeros AIFA-Pachuca el fin de semana. Muchas son las interrogantes que surgen sobre el costo para el erario federal y los beneficios sociales que este nuevo servicio reportará. Se trata de 58 kilómetros de vía en los que se usará lo que queda del antiguo derecho de vía que tenía el ferrocarril México-Pachuca y una inversión de 44 mil millones de pesos.
Será la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), quien estará a cargo de las obras del plantado de vías del tramo del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) a la bella airosa. En la estadística oficial se habla de un potencial de 83 mil pasajeros al día en ambas direcciones, pero no se ha estimado el costo del subsidio público que se tendrá que inyectar a este servicio público una vez que arranque sus operaciones que se estima puedan ser en el último trimestre del 2026.
Igualmente, nada se dijo si se contratará la construcción de nuevos equipos de tracción y sus vagones o se hará el recorrido con los mismos trenes que se “tomaron prestados” de El Insurgente, el ferrocarril México-Toluca, que además fueron construidos exprofeso para esa ruta por sus altas pendientes y exigencia de capacidad de frenado, que en el trayecto hacia Pachuca no se requerirán. Y es que, para el plazo tan corto que se ha anunciado estará listo, la orden de compra de los trenes ya va tarde.
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