El próximo 12 de marzo entraría en vigor la imposición de aranceles del 25% sobre las importaciones de acero y aluminio por parte de Estados Unidos, lo que afectaría a 4.7% del total de las exportaciones mexicanas, y además impactaría el valor de lo importado por la Unión Americana desde México, estimado en más de 22 mil 500 millones de dólares (mdd), señaló el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), quien indicó que también habría consecuencias severas en la industria automotriz nacional.
En un análisis realizado a las órdenes ejecutivas que firmó Donald Trump, presidente de Estados Unidos, sobre dicha medida arancelaria, el organismo reveló que de llevarse a cabo, los productos afectados alcanzaría a 4.7% de las exportaciones mexicanas, equivalentes a más del 1.5% del Producto Interno Bruto (PIB) de 2024.
Dentro de dichas órdenes firmadas por Trump, “los análisis sobre el impacto de estos aranceles se enfocaron en los capítulos 72, 73 y 76, los dos primeros relacionados con el hierro y acero y el tercero con el aluminio”, subrayó la investigación.
De acuerdo con el documento, el anexo a la proclamación 10895 (relacionada con el aluminio) incluye fracciones arancelarias correspondientes a los capítulos 83, 84, 85, 87 y 88, las cuales comprenden desde artículos misceláneos de metales comunes, reactores nucleares, calderas y maquinaria, entre otros, hasta partes y accesorios de vehículos y aeronaves.
Al interior destacan 123 fracciones arancelarias, 68 de ellas corresponden a la industria automotriz, como son los sistemas de aire acondicionado, tapas de vehículos y otras piezas para la manufactura y ensamble.
“En 2024, tan solo estas nuevas 68 fracciones representaron un valor superior a 20 mil mdd, equivalente a 3.91% de las exportaciones totales de México a Estados Unidos. En particular, la fracción 8708295160, que engloba partes y accesorios para carrocerías de vehículos, tractores y camiones, sumó siete mil 719 mdd en importaciones estadounidenses provenientes de México durante 2024”, se especificó en el análisis.
Lo anterior podría repercutir en Aguascalientes, Coahuila, Durango, Guanajuato, Morelos, Nuevo León, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Tamaulipas y Zacatecas, entidades federativas donde la industria automotriz es uno de los pilares económicos.
El análisis señaló que Donald Trump también ha anunciado medidas adicionales que afectan sectores estratégicos.
“Estas disposiciones se suman a los aranceles anunciados el 19 de febrero, que impactan la importación de automóviles, productos farmacéuticos y semiconductores, cuya implementación está prevista para el 2 de abril”, indicó.
Ante ese escenario, el IMCO ha propuesto dar cumplimiento cabal con el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC); fomentar el diálogo bilateral con la Casa Blanca y autoridades comerciales de la Unión Americana.
Además, alinear las estrategias del gobierno mexicano con el de Canadá. También, “preparar la lista de represalias de forma estratégica, minimizando el impacto a consumidores mexicanos, en caso de que los aranceles entren en vigor y, dado el caso, facilitar el acceso a proveedores alternativos”.
Sugirió fortalecer la industria nacional para reducir “el impacto económico y evitar consecuencias adversas para el desarrollo del país”.
Cabe recordar que en 2018, Donald Trump, en su primer periodo como presidente de Estados Unidos, impuso aranceles a las importaciones de acero y aluminio del 25% y 10% proveniente de México, Canadá y la Unión Europea.
En ese entonces México respondió de la misma forma, pero para varios productos estadounidenses, como carne de cerdo, papas, arándanos, whisky y materiales de construcción, con tasas que iban del 15% al 25 por ciento. Al final, México y el vecino del norte llegaron a un acuerdo para eliminar esa medida.
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