Este jueves 11 de mayo termina la vigencia del polémico Título 42, la medida de contención migratoria temporal, aplicada por el gobierno de Donald Trump durante la pandemia por COVID-19, que permite a oficiales de aduana de Estados Unidos retornar inmediatamente a las personas que crucen la frontera de manera ilegal sin ningún tipo de procesamiento.
El actual gobierno de Joe Biden ha declarado el fin de la crisis sanitaria y su firme intención, desde el año pasado, de dar fin al Título 42, desatando diversas represalias por parte del gobierno de Texas, al frente de Greg Abbott, a través de inspecciones exhaustivas a la carga que cruza por tractocamión desde la frontera con México, provocando largas filas de espera y consecuencias económicas-logísticas para miles de empresas.
Este tipo de medidas de represalia se presentaron en abril del año pasado y recientemente la semana pasada, aunque su efecto ha sido nulo ya que no se ha reportado ningún migrante detenido.
Ante el fin de la medida antimigratoria “es de vital importancia que importadores tengan un plan de contingencia que involucren múltiples proveedores, múltiples puertos y múltiples medios de transporte”, ha señalado Adrián González, presidente de Global Alliance Solutions, a través de un texto de análisis.
Así mismo, como una medida para tranquilizar a su población y otros actores políticos, el Departamento de Estado y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos han anunciado nuevas medidas contundentes para seguir reduciendo la migración ilegal, incluso con consecuencias más severas.
“(…) el levantamiento de la orden en virtud del Título 42 no implica que la frontera esté abierta”, ha declarado el DHS en un comunicado publicado a finales de abril.
Sin embargo, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP por sus siglas en inglés) ha alertado a la industria de una posible crisis en la frontera con México, por un incremento repentino en el flujo de migrantes a los Estados Unidos.
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Los cruces internacionales que podrían sufrir futuras consecuencias serían el de Brownsville, Pharr y Colombia, todos ellos colindantes con el estado de la estrella solitaria. Aunque también cuenta con la participación del puente de Laredo/Nuevo Laredo, el principal cruce fronterizo de mercancías de todo Estados Unidos.
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