Conforme va avanzando la tecnología y las incorporación de herramientas que impulsan la cadena productiva existe una mayor vulnerabilidad hacia a los ataques cibernéticos, por lo que se requiere contar con una estrategia de ciberseguridad para cuidar el activo más importante de una compañía: la información.
La llamada industria 4.0 representa la cuarta revolución industrial, marcada por la adopción del internet de las cosas (loT), computo híbrido y, por supuesto, la inteligencia artificial (IA), tecnología que es adoptada cada vez más por las diferentes industrias.
Durante el conversatorio organizado por la Industria Nacional de Autopartes (INA), Fernando Barranco, analytics & artificial intelligence manager de Minsait, señaló que el insumo clave es el dato, por lo que en la industria se está hablando de IA generativa.
“No solo se habla de IA, sino IA generativa, si se tienen algunas observaciones se pueden cubrir algunas necesidades. La IA es como un niño que está conociendo el mundo, ve qué hacen los expertos, tenemos que ir guiando esta herramienta para poder llegar más rápido a nuestros objetivos”, aseguró el especialista.
Comentó que la integración de la IA en la industria 4.0 aporta beneficios transversales a los procesos productivos mediante la automatización inteligente y la optimización de la calidad, por lo que el primer paso es tener claro a dónde se quiere llegar para que la IA no esté divagando, identificar si se tiene el dato, de lo contrario recolectar información.
Ciberseguridad, fundamental en el camino tecnológico
Erick Moreno, director de ciberseguridad Minsait, resaltó que ha habido un aumento exponencial del 35% en incidentes de ciberseguridad, principalmente por el aumento en la superficie de ataque, por lo que hay nuevos riesgos a los que se tienen que hacer frente.
“No podemos vivir pensando que seguimos sin riesgos tecnológicos, evidentemente debemos establecer una estrategia en el cuidado de estos activos de información”, dijo.
Explicó que en otros campos es difícil cuantificar el daño monetario que resulta de un ataque, sin embargo, en la industria esto sí es posible al imaginar lo que se perdería debido al paro de operaciones de una planta automotriz, por ejemplo, algo que se pone en la balanza con la inversión que se hace en ciberseguridad, que no necesariamente tiene que ser alta.
Hoy en día existen mayores riesgos para los proveedores de terceros de las grandes armadoras, por lo que existen algunas herramientas y certificaciones para blindar la cadena automotriz, un ejemplo es el Tisax.
Alexander Fernández, responsable de Estrategia y Operaciones de Ciberseguridad de Minsait, explicó que el Tisax es un estándar de seguridad de la información desarrollado por la VDA (Asociación Alemana de la Industria Autimotriz), con el fin de establecer y controlar los requisitos de seguridad en el intercambio de información confidencial entre empresas, clientes y proveedoras del sector automotriz.
Con esto, toda la información entre clientes y proveedores se está compartiendo seguramente bajo 12 objetivos de protección, por ejemplo, prototipos, datos personales, piezas y componentes, etc.
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