Este viernes se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el Convenio de Colaboración y Coordinación de Acciones para liberar el derecho de vía para la construcción del Cruce Internacional Mesa de Otay II en Tijuana, Baja California.
En el documento se explica que este cruce tiene el fin de facilitar el tránsito de personas y mercancías, atendiendo el intercambio comercial entre México y Estados Unidos, por vía Tijuana-San Diego, California.
La aduana de Tijuana ocupa la segunda posición a nivel nacional en cuanto a número de operaciones aduaneras, siendo que diariamente se internan a México un promedio de 50 mil vehículos ligeros por la garita de “El Chaparral” y 15 mil vehículos por la garita de “Otay”, un promedio de cinco mil cruces de tractocamiones por el área de carga de esta, cuyos tiempos de espera van de dos a cuatro horas en esta área.
“El flujo de vehículos ligeros entre Tijuana B. C., y su contraparte en los Estados Unidos de América, es el más grande en el mundo y opera en un espacio muy reducido, por lo que la infraestructura instalada para atender vehículos de carga se encuentra rebasada, lo que genera largas filas de espera, motivo por el cual existe la necesidad de aumentar la infraestructura para el cruce internacional a fin de atender el problema de tránsito de mercancías en dicha zona y optimizar el flujo de las operaciones de vehículos de carga”, se lee en el documento.
Por tal motivo, se explica, es necesario la implementación de proyectos de infraestructura, por lo que se requiere el proceso de liberación de derecho de vía, que comprende una franja de terreno que se necesita para la construcción, conservación, ampliación, protección y en general para el uso adecuado de una vía general de comunicación.
Este cruce fronterizo, que complementará los cruces San Isidro – El Chaparral y Mesa de Otay I, consiste en la construcción de vialidad de acceso al puerto fronterizo de 1.25 kilómetros con ocho carriles, cuatro por sentido con barrera central.
Además, se construirán 21 edificios para efectos de aduanas, migración, seguridad, inspección, etc.; la garita de 20 carriles, 10 para automóviles y 10 para camiones de carga, así como el Boulevard Las Torres, con una longitud de 1.25 kilómetros, con un entronque a la autopista Tijuana-Mexicali.
Asimismo, se pretende un distribuidor vial para el acceso al cruce desde la autopista Tijuana-Tecate y urbanización del polígono del puerto fronterizo, por lo que se asigna al presupuesto, la compraventa o expropiación de los terrenos, construcciones y bancos de material necesarios.
De acuerdo con la página de Proyectos México, del Gobierno federal, este cruce contará con una inversión estimada de 98 millones 522 mil 167 de dólares.
Para este acuerdo, participan autoridades federales, representadas por la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM), la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena); así como autoridades estatales, representadas por la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila, el secretario de Hacienda del estado, Marco Antonio Moreno, el secretario de Infraestructura Desarrollo Urbano y Reordenación Territorial; además de la presencia de autoridades de Tijuana, Monserrat Caballero, presidenta municipal, Jorge Antonio Salazar, secretario de gobierno del municipio, y Miguel Ángel Bujanda secretario de Desarrollo Territorial, Urbano y Ambiental.
Cabe mencionar, que de acuerdo con medios locales, en junio de este 2021 se firmó un acuerdo entre Estados Unidos y México para asegurar la creación de este cruce, siendo en agosto del año pasado que se iniciaron labores de construcción en San Diego.
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